No podemos culpar al tinterillo
Apodado El Cola de Zorrillo
Que escribió aquel diploma tan sencillo
Pues nosotros también lo revisamos
Y frente a los testigos lo firmamos
El día que amor eterno nos juramos
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Mas si eterno nunca es a pie juntillas
¡Debería escribirse entre comillas!
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No somos perfectos a veces nos equivocamos.
Tiene razón, Pensamientos.
Debemos asegurarnos de entender cada palabra del documento más importante que firmamos en nuestra vida.
Mil gracias por su comentario.
Muy bueno!
Juego y equilibrio entre palabras e ideas.
Salu2
Mil gracias, Mechas Poval.
Feliz Juevres.
Felicidades por tu boda lo primero, que creo que es lo más importante de la entrada aunque lo hayas dejado discretamente en segundo plano.
Y lo segundo decir que odio a la puñetera ortografía, soy de ciencias y de memoria auditiva, y me mata!! Busco información, me lo curro, pero no se me mete en la cabeza… siempre olvido, y vuelvo a cometer los mismos errores una y otra vez…
Gracias, Lost-Angel.
Las bodas y otras trifulcas de Remigio Sol son todas ficticias. Pero la esencia del mensaje es real. Igualmente real es también la gratitud por las visitas de mis amigos.
Interesante interesante… Me parece que me va a llevar tiempo cogerle el punto a este blog… a ver si hay suerte y nos acabamos entendiendo.
La verdad no se que me gusto mas el relato o los regalos mutuos que se logran por el escrito,igualmente se que delante de lo bueno hay algo bueno lo mismo que al costado o detrás,todo es armónico.
Felicitaciones.
Abrazos amigo!!!
¿Qué tal, Ruben?
La verdad es que con tanto divorcio ya no se sabe qué está pasando, man.
Gracias y abrazos.